¿Para qué pido tu voto para el Consejo de la Magistratura?

Estimado colega Abogado:

Quiero una Justicia independiente, transparente y para todos.

Hoy la Justicia está devastada y el Consejo de la Magistratura, desorientado. Con casi un 30% de juzgados y vocalías de Cámara vacantes, el Poder Ejecutivo ha puesto en marcha el proceso de “conjueces”, y ha designado por decreto a doscientas personas para cubrir por tiempo indefinido y con carácter generalizado dichos cargos.

Estos “conjueces” carecen de estabilidad en el cargo y por lo tanto, de independencia.

Pero lo peor es que este sistema de “conjueces” es funcional no sólo al kirchnerismo sino a cualquiera que venga a ejercer el Poder Ejecutivo en el futuro.

¿Cuánto van a tardar Massa, Macri, Scioli en preferir continuar con esta forma espuria de designación de jueces?

 Para detener este desastre institucional estoy impulsando, por acción de amparo, la declaración de inconstitucionalidad de los decretos que aprobaron las designaciones. Y mi plan para el Consejo, es continuar en esa línea, y al mismo tiempo, meterme (por la ventana, si es necesario) en la Comisión de Selección, para acelerar la resolución de concursos y la aprobación de ternas de candidatos idóneos e independientes.

Otra cuestión grave en los procesos de selección es el sesgo anti-abogados que se da en la resolución de los concursos. El propio funcionamiento y sistema de puntajes de la Escuela Judicial y la mayor cantidad y estabilidad de jueces en el órgano de selección, determinan que los funcionarios judiciales corran siempre con ventaja, en desmedro de los abogados. Por ello la Justicia no se oxigena con el ingreso de abogados y se retroalimenta, en cambio, la formación de la “familia judicial” con funcionarios que no han tenido la experiencia de “la calle”.

En la Comisión de Disciplina debe implantarse un sistema de resolución acelerada y voluntaria de denuncias, para que el magistrado tenga la opción de presentarse espontáneamente ante el plenario, efectuar su descargo y obtener una resolución inmediata y definitiva de cualquier denuncia. Así se despejan los expedientes que se van acumulando maliciosamente, con el solo propósito de ser utilizados para presionar a los jueces.

Para las causas más complejas, también debe acelerarse su trámite de resolución, pues la indefinición beneficia a los jueces deshonestos y aflige a los probos.

En todos los casos habrá sistemas de audiencias públicas. En serio: audiencias filmadas y subidas al sitio oficial del Consejo. Si el Consejo no lo hace, las filmaré y subiré personalmente.

Y trabajaré para demoler una peligrosa falacia que está muy instalada: eso de que “a los jueces no se los debe juzgar por el contenido de sus sentencias”.

No pretendo abrir denuncias por la opinable aplicación fundada del derecho, ni tornar el Consejo en una última instancia revisora. Pero, ¡atención! La arbitrariedad de sentencias existe. Y es intolerable ser víctimas de sentencias arbitrarias. Allí donde no hay pruebas del prevaricato, la arbitrariedad debe ser suficiente causal disciplinaria para investigar. Me parece totalmente insustancial perseguir a los jueces por supuestas faltas de “decoro” o por no justificar una inasistencia al Juzgado, y cerrar los ojos ante la arbitrariedad evidente, cuando ella es inequívoca expresión del dolo o de la grave negligencia en el juzgar.

Otra irregularidad tremenda es que el manejo de los fondos y nombramientos en la Justicia los acaparó la Corte. La Constitución es clara: ello corresponde al Consejo. Hay quienes dicen que manejar fondos y nombramientos le da más independencia al Poder Judicial. Además de inconstitucional, esto es falso. Lo que esta situación produce es que la Corte se encuentre hoy abocada a organizar enormes burocracias administrativas, que nada aportan al proceso de justicia, sino que le restan recursos y muchas veces directamente lo entorpecen.

Por último, potenciaré la importantísima función del Consejo de la Magistratura referida a la reglamentación de todo lo necesario para asegurar la eficaz prestación del servicio de justicia. Todo cuanto no funciona en el proceso y en los tribunales, por estar mal diseñado, desactualizado o mal aplicado, es responsabilidad del Consejo y será repensado y rediseñado. El objetivo es lograr una justicia abierta, ágil, eficiente, a la cual se pueda entrar y obtener solución del conflicto con bajo costo y en tiempo.

Porque todo cuanto perjudica a la eficiencia y economía del proceso hace el trabajo del abogado más penoso, más escaso, más costoso y sospechoso para la sociedad. Sólo sirve para generar la fantasía inconstitucional de “juzgados administrativos sin jueces ni abogados”, y alejar –en definitiva- al común de la gente de la verdadera Justicia. Así es como se condena a millones de personas a vivir en unsubsistema de a-juridicidad medieval, donde van perdiendo sus títulos de propiedad y sus derechos, y van diluyendo sus obligaciones y sus responsabilidades.

Vemos, por ejemplo, que el kirchnerismo avanza en el Congreso con la creación de nuevos organismos administrativos, para perseguir a las empresas, con la futura Ley de Abastecimiento y la parodia de un fuero federal del consumidor. La excusa (nada original, por cierto) es “proteger a Doña Rosa”. Pero que la justicia de “Doña Rosa”quede relegada a órganos administrativos es dramáticamente elitista e incompatible con la República. Es competencia del Consejo reglamentar y disponer procedimientos simples, oficinas y localizaciones adecuadas –siempre y estrictamente dentro de la Justicia ordinaria- para hacer llegar la Justicia a la gente.

Termino destacando la forma de trabajo que implementaré, la que he aprendido durante estos años en Bloque Constitucional: consiste en no someterse en ningún momento a las “verdades”, prácticas y corruptelas instaladas y generalmente aceptadas. Consiste en trabajar en serio, sin descanso, buscando las fisuras del statu-quo en todo lo que está mal. Accionando, denunciando, querellando, si es necesario.

Para terminar con la corrupción y el aprovechamiento de la Justicia por unos pocos.

Para hacer una Justicia independiente, transparente y para todos.

Para eso pido tu voto!

Muchas gracias !!

Ricardo Mihura Estrada

El 9/9 Votá Lista 9 (y llevá 9 amigos)